Renunci@ a ser adulto



Hace días mientras me preparaba para presentar un examen, y así cumplir con el requisito de obtener una certificación. Se me cruzó por la mente, la cantidad de “convencionalismo que deben ser” satisfechos para alcanzar con los estándares sociales y ser reconocidos como adultos y ser capaces…. y esto me llevó a reflexionar a ¿qué tanto renunciamos para ser adultos? y, entre lectura y reflexión me topé con este escrito que describe cómo nos vamos anudando “conductas” como si fueran nuestras, pero tan solo responden a ser aceptados, reconocidos y satisfacer a un convencionalismo.

Aquí va. Espero que te ponga a volar y te lleve nuevamente a tus seis…

Con la presente, presento mi renuncia a ser adulto.

He decidido aceptar la responsabilidad de tener seis años nuevamente.

Quiero navegar barquitos de papel en un estanque y hacer anillos tirando piedras al agua.
Quiero pensar que los dulces son mejor que el dinero, pues se pueden comer.
Quiero tener un receso y pintar con acuarelas.
Quiero salir cómodamente de mi casa sin preocuparme cómo luce mi cabello.
Quiero regresar a mi casa, a una comida casera y que alguien corte mi carne.
Quiero recostarme a la sombra de un viejo roble, y vender limonada con mis amigos en un día caluroso de verano.
Quiero abrazar a mis padres todos los días y enjugar mis lágrimas en sus hombros.
Quiero regresar a los tiempos donde la vida era simple...

Cuando todo lo que sabía eran colores, tablas de sumar y cuentos de hadas; y eso no me molestaba, porque no sabía que no sabía y no me preocupaba por no saber.
Cuando todo lo que sabía era ser feliz porque no sabía las cosas que preocupan y molestan.

Quiero pensar que el mundo es justo. Que todo el mundo es honesto y bueno.
Quiero pensar que todo es posible.

En algún lugar de mi juventud maduré y aprendí demasiado.

Aprendí de armas nucleares, guerras, prejuicio, hambre y de niños abusados.
Aprendí sobre las mentiras, matrimonios infelices, del sufrimiento, la enfermedad, el dolor y la muerte.
Aprendí de un mundo donde saben cómo matar y lo hacen.

¿Qué pasó con el tiempo en que pensaba que todo el mundo viviría para siempre, porque no entendía el concepto de la muerte, excepto cuando perdí a mi mascota?

Cuando pensaba que lo peor que pasaba era que alguien me quitara mi pelota de jugar o me escogiera de último para ser su compañero de equipo.
Cuando no necesitaba lentes para leer.

Quiero alejarme de las complejidades de la vida y excitarme nuevamente con las pequeñas cosas una vez más.

Recuerdo cuando era inocente y pensaba que todo el mundo era feliz porque yo lo era.

Caminaría de nuevo en la playa pensando solo en la arena entre los dedos de mis pies y la caracola más bonita que pudiera encontrar sin preocuparme por la erosión y la contaminación.
Pasaría mis tardes subiendo árboles y montando mi bicicleta hasta llegar al parque, sin la preocupación de que me secuestren.
No me preocupaba el tiempo, las deudas, o de dónde iba a sacar el dinero para arreglar el carro.
Sólo pensaría en qué iba a ser cuando grande, sin la preocupación de lograrlo o no.
Quiero vivir simple, nuevamente.

No quiero que mis días sean de computadoras que se inhiben, de la montaña de papeles en mi escritorio, de noticias deprimentes, ni de cómo sobrevivir unos días más al mes cuando ya no queda dinero en la chequera.
No quiero que mis días sean de facturas de médicos o medicinas.
No quiero que mis días sean de chismes, enfermedades y la pérdida de seres queridos.
Quiero creer en el poder de la sonrisa, del abrazo, del apretón de manos, de la palabra dulce, de la verdad, de la justicia, de la paz, los sueños, de la imaginación.
Quiero creer en la raza humana y quiero volver a dibujar muñecos en la arena...

¡Oh, siii! Quiero volver a mis seis años nuevamente... y ya está decidido.

PD: Desconozco el autor

Hoy, después de un varios soles y lunas, en mi proceso de sanación y aceptación, te puedo decir, que particularmente, aunque no renuncié a ser adulto, voy en vías de conciliar mi niña de seis años con esta hermosa adulta que he REdescubrierto.

¿Cómo lo hago?

Me doy el permiso de irme a mi isla de bobadas, siempre que así lo sienta.

De reírme sin pedir permiso e inclusive de sostener mi sonrisa, aunque alguien, desafiantemente me pueda clavar una mirada de cuestionamiento.
De aligerar mi paso y entretenerme a jugar con el charco de agua que resta después de una rica tarde de lluvia.
De andar descalza, y pedir permiso en casa ajena, si me es posible quitarme los zapatos.
De bailar, con tan solo el sonido de mi música interna.
De a poco, he ganado la consciencia que la vida no es tan seria como pensaba.
Que todo se resuelva, y no tengo que apurarme a seguir viviendo como adulto, como solía hacerlo desde la adolescencia, y me decía, compórtate, no puedes fallar, tienes que ser perfecta.
Que soy valiente, al reconocer que no tengo todas las respuestas y que me encanta equivocarme.
De retarme a seguir aprendiendo de mí.
De descubrirme soñando y haciendo volar cometas enredados y envueltos en chispas de amor.
De tomar consciencia que la vida se vive experimentando, todo aquello que alguna vez considere cursi, pues hoy reconozco que alimenta mi alma, y me pone a vibrar.

Hoy disfruto cada momento, y me encanta pillarme, al verme enfrente al espejo y decirme, ¡wow la vida es bella y yo también.!

No me importa que me descubran embelesada mirando al cielo, o tomarme un espacio para contemplar el silencio.


Y RESPIRAR…RESPIRARME…


De jugar… y no juzgar…
De amarme y llenarme con tan solo oler, los aromas de un rico café mañanero.
De hablar sola, con Dios y reconocer y agradecer que gracias a EL, soy…

Que hoy abrazo y beso sin tapujos, como me nace…y sobre todo hoy digo a voz populi…TE AMO GRANDOTE.

Y tú…

¿Has pensado en renunciar a ser adulto?

¿Qué haces para conciliarte con ese niñ@ de seis años y este adult@ de hoy?

Escríbenos haznos saber tus comentarios, nos encanta leerte.

Soy Iride Rivera, coach motivacional, escritora, profesional de las finanzas, aprendiz de la vida. Experimentar es mi metodología, el vehículo para gestionar mi propósito de vida, SERVIRTE A TRAVES DEL AMOR y vivas LA MAGIA DE VOLVER A TI, A TU ESENCIA.

Nos encontramos a través de mis redes:

https://www.instagram.com/iride_rivera/











Comentarios

  1. Una etapa llena de inocencia y alegria, en cada despertar. Bonito sentirlo y vivirlo. Gracias, hermoso escrito.

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